El presidente del PJ bonaerense y líder de La Cámpora, Máximo Kirchner, encabezó en La Plata un acto político para reactivar su presencia en el plano nacional. Se da días después de que su madre, Cristina Fernández de Kirchner, hable en la provincia.
Previo al acto, Máximo se sacó un foto con los intendentes de La Plata. Luego, se reprodujo un video del kirchnerismo. El actual legislador entró al recinto con una versión de violín de la canción «Ji ji ji» de Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota.
“No hay que enojarse, compañeros y compañeras. Hay que dejar de patalear, hay que ponerse a construir, a seguir construyendo, a organizarse”, expresó Máximo frente a ciento de personas en el Estadio Atenas, refiriéndose al veto presidencial, justificando que son «facultades constitucionales» del presidente.
El dirigente apuntó contra el modelo RIGI. «La traducción (del RIGI) sería que la única manera de tener un futuro como país es que su pueblo viva de manera indigna. Si un pueblo vive de manera indigna no hay país y esto es lo que tenemos que entender», apuntó.
«Si nuestro pueblo tiene hambre y se llevan nuestro gas, nuestro petróleo, la minería el oro y la plata, es saqueo», agregó en esta línea.
En otro plano, lanzó un mensaje a la interna peronista del distrito, al advertir que «si los que fueron señalados por el dedo de Cristina (Kirchner) se quejan, ¿qué nos queda a los que no hemos sido señalados y hacemos lo que tenemos que hacer?».
Máximo le bajó el precio a la situación actual diciendo que no le asusta porque ya la vivió «veinte millones de veces esto».
«La decisión, el centro y el núcleo de lo Cristina y por qué tomaba la decisión, era porque entendía que el pueblo pedía que no gobernara más Macri, y no pensó si tenía que ser ella o no, sino que había un pueblo que demandaba que el gobierno de Macri concluyera de manera democrática como se debía. Y así fue que Alberto Fernández fue presidente de los argentinos y argentinas. ¿Por qué? Porque había muchos sectores dentro que no se la aguantan a ella, hay que decirlo, no tengo problema. no se la bancan porque labura, no se la bancan porque trabaja todos los días, y porque no tiene miedo. Y uno de los problemas que tenemos hoy en el presente y en el peronismo es que hay muchos dirigentes con miedo», dijo.
En línea con esto, agregó: “Cuando muchos decían que a Cristina había que jubilarla, la compañera salió a caminar la provincia de Buenos Aires, dio la pelea”.
Daniel Scioli y Axel Kicillof quedaron en el medio del fuego cruzado. Del ahora secretario de Deporte, dijo: “Basta de Sciolis. La frustración del peronismo se debe a aquellos que, tras llegar al Congreso, se dan vuelta como una media”.
Por otro lado, al gobernador de la Provincia de Buenos Aires fue atacado por los propios presentes. «Y si queres otra canción, veni te presto la mia”, arengaban desde el público.