Un fuerte temporal se registró en Córdoba y localidades del interior, sin que se reportaran víctimas, aunque hubo evacuados e interrupciones en los servicios de electricidad y agua potable, por lo que las autoridades activaron programas de asistencia para los damnificados, se informó desde Casa de Gobierno provincial.
Una fuente de la Secretaría de Gestión de Riesgo Climático, Catástrofes y Protección Civil, detalló que, cerca del inicio del Año Nuevo, se generó un fuerte temporal en la zona sur provincial, que fue atravesando por la ciudad de Córdoba y localidades del Gran Córdoba, en algunos casos acompañados por intensas lluvias, viento y granizo.
El relevamiento oficial detalla que las localidades de Alta Gracia y Anisacate, en el departamento San Martín del Valle de Paravachasca, fueron las más damnificadas por el anegamiento de viviendas, que obligó a la evacuación preventiva de una veintena de personas, caída de árboles y postes de red de tendido eléctrico que interrumpieron ese servicio.
Debido a las crecidas de los ríos Anisacate y Segundo se interrumpió el servicio de agua potable de red, en tanto personal de Bomberos y especialistas de las brigadas de Defensa Civil trabajan en la esa zona para recuperar progresivamente la normalidad, informaron voceros de los organismos involucrados en esa tarea.
En tanto, en la ciudad de Córdoba, se produjo un importante socavón en la avenida Vélez Sarfield. El municipio trabaja para recomponer los destrozos en esa avenida y puso en marcha un operativo para recuperar el servicio de luz en varios barrios, debido a la caída de postes de electricidad que también afecta al funcionamiento de semáforos, mientras que por la crecida del río Suquía hubo viviendas inundadas y varios vehículos quedaron varados por el anegamiento en las calles.
La situación fue similar en las localidades de La Calera y Villa Allende, en las sierras chicas de Gran Córdoba.
En localidades de los departamentos de Juárez Celman y Río Cuarto el temporal fue de mayor intensidad, por la caída de granizo y, en todos los casos, no se reportaron daños personales.
El Gobierno de la provincia, mediante comunicado oficial, informó que se dispuso de ayuda para los damnificados, particularmente en Alta Gracia y Anisacate que fueron los más afectados, mediante la provisión de colchones, frazadas, alimentos y chapas.
Asimismo, un equipo de asistentes, del Ministerio de Desarrollo Social y Promoción del Empleo, trabaja en esas localidades para relevar la situación socioeconómica, a los efectos de resolver si corresponde activar el Fondo Permanente para Atención de Desastres, vigente desde 2015, para la contención solidaria a las familias afectadas por desastres y catástrofes naturales.
También alertó sobre el “aumento del caudal de ríos y arroyos” en distintas regiones de la provincia, por lo que el secretario de Gestión de Riesgo Climático, Catástrofes y Protección Civil, Roberto Schreiner, recomendó tomar precauciones a quienes se encuentren en las inmediaciones de los cursos de agua.
“Hay que tener cuidado porque los ríos pueden sufrir crecientes importantes”, alertó y se refirió especialmente a los ríos Cosquín, San Antonio, Suquía, Los Chorrillos, Panaholma, San Guillermo, Mina Clavero, Santa Rosa de Calamuchita, Anisacate, Calamuchita, y Xanaes, entre otros. (Télam – Crónica TV)