Según trascendió un hombre de 62 años residente en la Ciudad de Buenos Aires es el primer contagio confirmado de esta subvariante también denominada «sigilosa».
El caso fue reportado el 18 enero pasado. La muestra de ese paciente fue analizada por el Instituto Malbrán, que lo reportó en la base de datos de la Global Initiative on Sharing All Influenza Data (GISAID) que, desde 2008, que proporciona acceso abiertos a datos genómico del virus influenza y el coronavirus responsable de la pandemia de Covid-19.
BA.2 es uno de los sublinajes de Ómicron, y podría escalar aún más los contagios a lo largo del mundo ya que muestra signos de propagación de mayor rapidez, aunque no parece causar una enfermedad más grave que la variante original. Hasta el momento, las vacunas resultan ser eficaces contra todas las ramas de Ómicron para prevenir enfermedad grave y muerte.
Según los científicos, esta nueva variante presenta signos de propagación de mayor rapidez, aunque no pareciera causar una enfermedad más grave que el sublinaje BA.1. Por lo que, según los especialistas, por el momento las vacunas seguirían resultando eficaces para prevenir los casos de enfermedad grave y muerte.
“Se deben priorizar las investigaciones, tanto independientes como comparativas con la BA.1, sobre las características de la BA.2, incluyendo su virulencia y la capacidad de evadir las vacunas”, aseguró el último viernes Van Kerkhove, pidemióloga que lidera la respuesta de la OMS al COVID-19.