Esta fecha conmemora la declaración de los derechos de las personas de la tercera edad que impulsó Eva Perón en 1948 y que luego fue incorporada un año después a la Reforma Constitucional.
Cada 28 de agosto es celebrado el Día de la Ancianidad en el país para conmemorar la declaración de los derechos de las personas de la tercera edad que impulsó la primera dama Eva Perón hace más de medio siglo.
Lo hizo ese día de 1948 al enfatizar la importancia de incluir en la Reforma Constitucional aquellas garantías que velen por el cuidado y respeto de las personas mayores. Así ocurrió un año después, en 1949, por decisión del entonces presidente Juan Domingo Perón.
¿Cuáles fueron las garantías que impulsó Eva Perón para las personas mayores?
–Derecho a la Asistencia: toda persona anciana debe contar con la protección integral por parte de su familia. En el caso de desamparo, abandono o imposibilidad mayor de llevar a cabo esta tarea, el Estado será quien deba hacerse cargo de dicho cuidado.
–Derecho a la Vivienda: toda persona debe contar con un espacio cómodo que ayude a cuidar su salud y seguridad, mediante la higiene, calefacción y medidas de resguardo del mismo.
–Derecho a la Alimentación: las personas mayores deberán contar con una alimentación adecuada para su salud, condición física, peso y edad, previamente indicada por un médico o nutricionista.
–Derecho al Vestido: promueve a garantía de una indumentaria cómoda, que se adecúe al clima y necesidades del individuo, como por ejemplo la utilización de cinturas elásticas en casos de requerirlo.
–Derecho al Cuidado de la Salud Física: deberán ser asistidas para el cumplimiento de la ingesta de medicamentos, ejercicios indicados por médicos y otros requisitos que cuiden su organismo.
–Derecho al Cuidado de la Salud Moral: las personas mayores serán libres de ejercitar su fe, espiritualidad, prácticas de culto o cualquier actividad que contribuya con sus gustos, preferencias y bienestar espiritual.
–Derecho al Esparcimiento: toda persona anciana debe contar con momentos de entretenimiento y goce, donde puedan de una manera controlada y segura, disfrutar.
–Derecho al Trabajo: en el caso de encontrarse en condición, la laborterapia productiva debe ser llevada a cabo para ejercitar sus aptitudes físicas, mentales y promover la autoestima.
–Derecho a la Expansión: consiste en la libertad de pensamiento y expresión, especialmente en los últimos años de vida de la persona.
–Derecho al Respeto: toda persona mayor merece respeto, empatía y consideración por parte de todos los individuos de la sociedad.