La decisión quedó oficializada tras la publicación de una resolución en el Boletín Oficial, que reemplazó la prohibición previa por un sistema de permisos con requisitos estrictos y controlados.

→ La nueva normativa implica un cambio en el régimen de autorización y fiscalización de este tipo de armas, que ahora queda bajo la órbita exclusiva del Registro Nacional de Armas (RENAR), dependiente del Ministerio de Seguridad Nacional.
← A partir de esta reforma, los legítimos usuarios y las entidades de tiro podrán adquirir y poseer armas semiautomáticas alimentadas con cargadores de quita y pon, como fusiles o subametralladoras de asalto derivadas de modelos militares y de calibre superior al .22 LR.