La actividad industrial se derrumbó 14,2 por ciento en abril último mientras que ya hubo más de 15 mil despidos en el sector, según un informe de la UIA.
No obstante, hubo un repunte del 4,5% con relación a marzo, que podría indicar que la recesión fabril tocó un piso.
Los datos se explican por la mayor cantidad de días hábiles y la normalización de cuestiones puntuales que habían atravesado algunos sectores en marzo. Igualmente, se
trató del onceavo mes de caída interanual consecutiva.
El primer cuatrimestre acumuló una baja de 12,4% interanual y, según la UIA, los datos de mayo reflejan que persiste la caída interanual.
En la serie mensual podría observarse un amesetamiento o leve caída.
Los datos del mes estuvieron afectados por las dificultades en el comercio con Brasil por
las inundaciones en el sur de ese país.
En este marco, hubo bajas pronunciadas en el sector Automotor (-27,9%), en Despachos de Cemento (-27,1% i.a.) y en los patentamientos de maquinaria agrícola (-22,9% i.a.).
La demanda de energía eléctrica de Grandes Usuarios Industriales volvió a caer significativamente (-11,3% i.a.).
En cuanto al intercambio comercial con Brasil, se registró una caída en las importaciones (-42,8% i.a.), y las exportaciones (-3,9% i.a.).
Finalmente, la Liquidación de divisas (que creció durante los primeros tres meses del año) volvió a caer (-38% i.a.) en parte, por la base de comparación del dólar soja de 2023.
«Si bien la actividad podría estar cerca de un piso, el sector industrial enfrenta
dificultades por la baja demanda, así como aumentos de costos. Será importante que, en la medida que haya una recuperación del mercado interno, la misma no sea canalizada únicamente en mayores importaciones, sino que traccione una recuperación de la producción local y el empleo», indicó el informe de la UIA.
En marzo, el empleo asalariado registrado en la industria aceleró su caída.
Se perdieron 4.881 puestos en el mes y ya se acumula una baja de 15.357 respecto de
agosto de 2023.
En este escenario, la entral fabril reclamó que la recuperación del sector no provenga solo de mayores importaciones sino de un incremento en la producción local.
Según la UIA, los buenos datos de abril “se explican por la mayor cantidad de días hábiles y la normalización de cuestiones puntuales que habían atravesado algunos sectores en marzo”.
“Igualmente, se trató del onceavo mes de caída interanual consecutiva. Los datos de mayo reflejan que persiste la caída interanual”, dijo la entidad fabril.
El reporte indicó que “en la serie mensual podría observarse un amesetamiento o leve caída. Los datos del mes estuvieron afectados por las dificultades en el comercio con Brasil por las inundaciones en el sur de ese país”, planteó la UIA.
Analizado por sectores, hubo bajas pronunciadas en el Automotor (-27,9%), en Despachos de Cemento (-27,1%) y en los patentamientos de maquinaria agrícola (-22,9%), todos en términos interanuales.
La demanda de energía eléctrica de Grandes Usuarios Industriales volvió a caer significativamente (-11,3%) mientras que el intercambio comercial con Brasil registró una caída en las importaciones (42,8%), y las exportaciones (-3,9 por ciento).
La liquidación de divisas (que creció durante los primeros tres meses del año) volvió a caer (-38%) en parte, por la base de comparación del dólar soja de 2023, explicó la UIA.
“Si bien la actividad podría estar cerca de un piso, el sector industrial enfrenta dificultades por la baja demanda, así como aumentos de costos», señaló el informe.
Consideró que “será importante que, en la medida que haya una recuperación del mercado interno, la misma no sea canalizada únicamente en mayores importaciones, sino que traccione una recuperación de la producción local y el empleo”.
Advirtió que el empleo asalariado registrado en la industria «aceleró su caída y se perdieron 4.881 puestos en el mes, y ya se acumula una baja de 15.357 respecto de agosto último.
El 53% de las empresas tuvo caídas de la producción, el 60% en las ventas, el 37% en las exportaciones y el 24% caídas en el empleo.
“El 12% de las empresas encuestadas presentó problemas para afrontar integralmente todas sus obligaciones (salarios, proveedores, compromisos financieros, tarifas de servicios públicos e impuestos), el valor más alto de la serie”, indicaron. “Los mayores atrasos fueron en el rubro impuestos».
Las empresas consideraron que su situación económica está peor que hace un año. Esto se observó en las percepciones sobre la propia empresa (58,4%), en la situación del sector de actividad (77,2%) y el país (67,2 por ciento).
Pero se volvió a registrar una mejora en las expectativas para dentro de un año: el 62,1% de las empresas espera que la situación económica de su empresa mejore, mientras el 68,3% aguarda una mejora en la situación del país.
De acuerdo al estudio, las 16 divisiones de la industria manufacturera presentaron caídas interanuales.
En orden a su incidencia en el nivel general, se registraron disminuciones en “Alimentos y bebidas”, 9%; “Maquinaria y equipo”, 29%; “Productos minerales no metálicos”, 35,2%; “Industrias metálicas básicas”, 19,3%; “Sustancias y productos químicos”, 10,2% y “Muebles y colchones, y otras industrias manufactureras”, 35 por ciento.
Fuente: NA