Con una participación del 60% del total de hectáreas implantadas y de la producción nacional, Entre Ríos consolida su liderazgo como la principal productora de nuez pecán en Argentina, posicionando a esta economía regional como una de las más dinámicas y con mayor proyección internacional.

El crecimiento sostenido del sector no solo genera empleo y atrae inversiones, sino que también impulsa el desarrollo de zonas rurales estratégicas. Según datos oficiales, la provincia cuenta con entre 4.000 y 5.000 hectáreas cultivadas, dentro de un total nacional que supera las 10.000, distribuidas en diez provincias. Los principales polos productivos entrerrianos se localizan en Villa Paranacito, San Joé, Crespo, Gualeguay y Concordia, áreas que convinan tradición agrícola, condiciones naturales favorables e infraestructura logística clave, sobre todo en el delta del paraná.
Exportación y agregado de valor
Un rasgo distintivo de la cadena pecanera es la apuesta por la exportación de nuez pelada, lo que multiplica el valor del producto y fomenta el desarrollo de capacidades industriales locales. Actualmente, cerca del 90% de la producción nacional se destina a mercados externos como Lituania, Estados Unidos, Brasil y Rusia.
La apertura de nuevos mercados es otra prioridad. Tras la reciente habilitación sanitaria, el sector espera con especial interés la consolidación del comercio con China. Además, a fines de agosto Argentina logró la apertura del mercado de Israel para la exportación de nuez sin cáscara, fruto de las negociaciones entre el Senasa y el Servicio de Protección Vegetal e Inspección de Plantas (PPIS) de ese país.
El rol del Senasa
El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) desempeña un papel clave en todo el proceso: desde el monitoreo fitosanitario en viveros y campos hasta la certificación, trazabilidad y control en plantas procesadoras y empaques. Este acompañamiento garantiza la calidad, sanidad e inocuidad del producto, fortaleciendo la confianza de los consumidores internacionales.
Una Economía en expansión
Desde el Clúster del pecán de Argentina, qye nuclea a los distintos actores de la cadena de valor, destacan que el cultivo representa una inversión de largo plazo con alta rentabilidad frente a producciones tradicionales. Además, remarcan que las condiciones climáticas y geográficas de Entre Ríos permiten aprovechar la contraestación con el hemisferio norte, lo que otorga una ventaja competitiva fundamental en el comercio exterior.
La cosecha en la provincia comienza en abril y alcanza su pico en junio y julio, con entregas al mercado internacional que se extienden hasta febrero o marzo del año siguiente. (Paralelo 32)