El hecho ocurrió en la localidad de El Chorro el pasado jueves, a donde Eber Solis, quien es a la vez ahijado del gobernador Gildo Insfrán, había asistido para compartir un almuerzo junto a una ganadera encargada de llevar adelante un remate de hacienda.

Los ladrones irrumpieron en el asado del cual participaba el vicegobernador de la provincia y se llevaron toda la carne y los chorizos.
El motivo del encuentro era festejar los resultados del evento realizado durante esa misma semana, en el que se vendieron más de 700 vacas y resultó un éxito para la localidad formoseña. Por eso la pompa de invitar al vicegobernador.

Mientras los invitados se encontraban charlando y dando la bienvenida a quienes habían llegado hace pocos minutos al lugar, un grupo numeroso de ladrones irrumpió en el encuentro y comenzó a robarles lo que había sobre el fuego.
Apuntaron directamente hacia las parrillas donde ya se estaba cocinando la mercadería: rápidamente, la decena de delincuentes que apareció desde el monte formoseño y comenzaron a agarrar la carne, los chorizos y las morcillas y a llevarse todo.
El hecho quedó registrado en varios videos que comenzaron a circular en la provincia y que hicieron viral lo sucedido. En los mismos se ve cómo varios hombres agarran tenedores y cuchillos y se roban toda la carne y las achuras.
Lo hicieron a la vista de todos mientras el resto de los presentes se ubicaban en forma de ronda al lado de los asadores y miraban cómo el saqueo sucedía.
Una parte de la carne se la llevaron en sus manos y otra, en platos y ollas que habían llevado para realizar el saqueo. Se ubicaban de a dos o tres: mientras uno pinchaba y agarraba varios trozos en un intento, los otros estaban atentos para agarrar todo rápidamente y liberar el tenedor para llevarse más.
Del asado al guiso improvisado
Si bien los comensales llegaron a dar aviso a la policía, los agentes provinciales no llegaron a intervenir dado que los ladrones se escabulleron en el monte llevándose toda la comida en sus manos.
Aunque el asado finalmente no pudo hacerse, el encuentro no se frustró por completo. A fin de concretar el almuerzo de todas formas, los presentes improvisaron un guiso y finalmente comieron todos juntos.
Algunas versiones sindicaron que el atraco se produjo por parte de comunidades indígenas que residen cerca de El Chorro y que habrían reaccionado por no haber sido invitadas a la celebración. No obstante, no hubo detenidos ni, por el momento, acusados por el insólito robo.