Se desató el torbellino en el interior del espacio que se denomina «Renovación y Esperanza» y que competirá contra José Carlos Aimone quien aparece como el precandidato favorito en el electorado paceño encabezando la Lista 102 «Frente Político y Social».
¿Qué desató el desarme interno en lo que había nacido como Agrupación «Ramón Carrillo»?
Primeramente hay que decir que, en estás horas se analiza la impugnación de uno de los precandidatos a concejal de ese espacio. Se trata del subdirector del Hospital 9 de Julio, quien representa la razón de ser de la lista que competirá en la PASO, ya que es el único que mide o que llega a sumar intención de votos en ese grupo. Paradójicamente no encabeza la lista como precandidato a Intendente porque es funcionario de alto rango en la Policía de Entre Ríos, sin embargo aceptó ir en el primer lugar de los precandidatos a concejales estimando que, desde esa posición traccionará votos para su amigo personal, el actual Director del Hospital. Pero ya están asegurando que, no ocuparía el cargo en caso de ser electo porque le exigiría renunciar a su función primera, que es su máxima pasión e incluso, no convendría en lo económico. «Para qué ocupar una banca en el Concejo si le sumo mucho más a la sociedad, en las dos funciones que estoy desarrollando actualmente». Esa pareciese ser la lógica que no se desprende de la ética. El resto tiene mucho más que ver con la especulación y el poder. Así que, complicadísima situación y alta exposición para una persona de perfil muy bajo. Insistimos, irán hasta la instancia de impugnación en caso que no renunciase a percibir más de un ingreso del estado (o sea del pueblo), entrerriano.
Pero no solo esta situación sacudió en las filas de «Renovación y Esperanza». Salió a luz otro escándalo interno.
Uno de los que acompañó la creación de la Agrupación «Ramón Carrillo» y que se puso a entera disposición, incluso declaró públicamente su apoyo total a la dupla de médicos, fue el Comunicador Social, Marcelo «Chona» Salva.
Marcelo fue el responsable de colocar los primeros pasacalles que proponían al director del hospital como intendente. Pero eso no fue todo, también se encargó de organizar las primeras reuniones y convocar gente que se podía llegar a entusiasmar con la idea de presentar una propuesta para estas elecciones. En definitiva, Marcelo fue artífice, desde el llano, de lo que hoy conocemos como «Renovación y Esperanza», sin olvidar que, su trabajo diario en medios radiales, le aseguraría al duo de médicos amigos, una instalación constante de sus ideas.
Todo se derrumbó cuando en un grupo de WhatsApp interno que utiliza la Agrupación Carrillo para organizar la logística de la campaña, criticaron con dureza a Marcelo Salva.
Aparentemente, «Chona» Salva, había tomado la decisión de no participar más del grupo por no coincidir con las personas que fueron rodeando al precandidato y, según sostiene Salva, tomando decisiones totalmente erradas y perjudiciales para la propuesta política. Para resumirlo, «Chona», dejó de ser tenido en cuenta, fue prácticamente desairado por sus amigos precandidatos, por eso se abre aunque sin dejar de apoyar la propuesta.
Lo que pudo haber quedado en un distanciamiento y nada más, ya que para Marcelo Salva, tanto el director del hospital como su segundo en el cargo, son y seguirán siendo sus amigos a quienes aprecia mucho, se terminó convirtiendo en un caos y traiciones a partir de los duros mensajes de WhatsApp que insultaron de arriba a abajo al conductor radial. En simples palabras, agradecían que se haya alejado del grupo.
Pero, ¿qué fue lo que más le dolió a Salva?, Porque él sabe del juego político y también sabe mucho de críticas infundadas, eso prácticamente no le afecta, al contrario, lo toma con mucho humor. Pero lo que sí lo afectó es que, ni el precandidato a intendente, ni su amigo precandidato a concejal, dijeron absolutamente nada. Tampoco lo llamaron para pedirle disculpas por los exabruptos compartidos en el grupo de WhatsApp del cual se había retirado Marcelo pero en el que aún permanecían sus hijos, familiares y amigos.
«Me pasaron todo lo que se dijo de mí y la verdad, no me interesa porque conozco a la persona que lo escribió, es de apellido Salva del barrio Congo y no es pariente mío», dijo y agregó: «lo que me duele es que a esos mensajes lo leyeron mis hijos, familia que yo había sumado al grupo y amigos. Además, me molesta que nadie me llamó para, por lo menos, pedir disculpas».
Todo es muy raro en el espacio de médicos amigos. Nunca se vio tanto grado de desprecio interno por una persona que fue una de las artífices de la propuesta política y hoy, no solo está alejada por propia decisión al ver los malos movimientos que llevan adelante los precandidatos, sino que además, lo desprecian hasta el agravio.
Vale aclarar que, como existen personajes que no entienden, ni de política, ni de comunicación y suelen enojarse con «el cartero» cuando se ven heridos en sus susceptibilidades, todo lo expresado en estas líneas fue expuesto al aire por Marcelo «Chona» Salva en su programa de radio.