Néstor Espósito, el periodista que publicó el chat de Telegram entre jueces, fiscales, funcionarios del PRO, integrantes de la AFI y empresarios de Clarín, cuenta cómo accedió a la información. “Hubo una intención deliberada de que esto se conozca a horas de la sentencia en la causa Vialidad”, afirma.
Se filtraron los chats de Telegram que confirman la reunión que conjuntamente realizaron jueces, fiscales, funcionarios del PRO porteño y empresarios de Clarín a la mansión que el magnate Joe Lewis tiene en Lago Escondido, Rio Negro. Entre otras cosas, los mensajes refieren a la difusión y falsifiación de facturas para contrarrestar las acusaciones por dádivas vinculada al viaje.
En las últimas horas el presidente Alberto Fernández salió a anunciar en cadena nacional que instruyó al Ministerio de Justicia para que investigue penalmente estos posibles delitos: “Por vez primera queda expuesto ante nosotros, con enorme contundencia, el modo en que ciertas corporaciones operan sobre funcionarios, jueces y fiscales procurando de ellos favores que, en muchos casos, buscan ventajas indebidas, mientras que en otros simplemente propician la persecución de aquellos que los enfrentan”.
El origen de la filtración es atribuida a un hackeo del teléfono celular del ministro de Seguridad Porteño, Marcelo D’Alessandro, quien esta mañana negó la veracidad de los diálogos y adelantó que también irá a la Justicia. D’Alessandro es uno de los funcionarios que había sido mencionado como parte de la comitiva que viajó a Lago Escondido. Otro de los involucrados es el juez en lo Penal Económico Pablo Yadarola, que también presentó una denuncia.
El resto de los integrantes serían el juez federal Julián Ercolini; el camarista de Casación Carlos Mahiques; al juez en lo contencioso administrativo federal Pablo Cayssials; al jefe de los fiscales de la Ciudad, Juan Bautista Mahiques; los directivos del Grupo Clarín Jorge Rendo y Pablo Casey; al asesor de comunicación Tomás Reinke; y al ex director de jurídicos de la SIDE, Leonardo Bergroth.
Si bien el encuentro ya había sido develado días atrás en Página 12, quien hizo públicos los chats fue el periodista de judiciales de Tiempo Argentino y colaborador de Canal Abierto, Néstor Espósito: “Me enteré de la existencia de este material el sábado a la tarde, preparándome para ver el partido de la Selección con mi hijo y unos amigos, cuando a las 14 horas me llega un WhatsApp de un abogado conocido con el link que me llevó a Patagonia Facts. Lo primero que pensé fue que era falso pero como aparecían nombres de colegas que conozco, hice un par de llamados y mis interlocutores me confirman que era cierto, verosímil”.
“Los diálogos dan cuenta del temor que tenían de que aparecieran las fotos del grupo de viajeros -por así decirlos- en la recepción en el aeropuerto de Bariloche”, señaló Espósito en comunicación con Canal Abierto Radio. “No sé qué es lo que fueron a hacer porque tampoco surge en los chats ni en la causa judicial abierta en Bariloche, pero los jueces no pueden aceptar una invitación de esta manera porque puede ser considerado un delito de recepción de dádivas”.
Con respecto a la cadena nacional realizada tras la filtración de los chats por el Presidente Alberto Fernández, manifestó: “El procedimiento es promover una investigación judicial; si esto va a tener un andamiaje o éxito, la verdad que no lo creo”.
“Acá está pasando algo”, aseguró dando cuenta de que “hay delitos que se están cometiendo por quienes deberían ser garantes de la Ley”. En este sentido, subrayó la importancia de que se investiguen “los hechos de interés público porque la sociedad tiene derecho a saber”.
Y refirió a la coincidencia de que esto suceda horas antes de que se conozca la sentencia contra la vicepresidenta Cristina Fernández en la causa Vialidad: “No es casual, las fuentes nunca son inocentes y siempre tienen oportunismo para dar a conocer la información que quieren; así es en el Poder Judicial”.
Fuente: (Canal Abierto)