Si hay algo que no se puede permitir propagar dentro de cualquier organización, es el malestar internas por disputas o diferencias entre los colaboradores que terminan afectando al normal funcionamiento de ese organismo. En este amancebamiento se encuentra inmerso el nosocomio de salud más importante de La Paz y la región noreste de la provincia. Quejas, enojos entre las jefaturas y solicitudes de despidos. Un desmanejo que hasta el momento no logran ordenar desde la conducción. Todo lo que quedó expuesto luego del triste caso “Rocío”; vuelve una y otra vez a la superficie. El fantasma de la intervención ¿ronda por el norte entrerriano?
Todos en la ciudad de La Paz conocen, al menos una anomalía en el funcionamiento del Hospital Público, o tienen una opinión formada sobre dónde se podría mejorar y nos e hace nada. Más allá de destacar las virtudes del nosocomio, siempre remarcan algo que se sabe, funciona mal.
Podríamos hablar de los horarios de los profesionales ante emergencias. O podríamos enfocarnos en el desánimo que existe en los médicos que atienden en la Guardia por dos mil pesos la hora. O podríamos hablar de las horas no pagas a enfermeros sobrecargados. O centrar en los posibles casos en los que podrían existir conflictos de intereses. O la polémica existente por algunas denuncias que pululan en archivos judiciales de supuesta impericias y malas praxis, entre otras cuestiones ligadas a lo operativo de esa institución. Todo eso sin hacer mención a los incumplimientos de la clase política que llevó a que en este 2024, no exista en esa ciudad cabecera de departamento, ni siquiera una sala de emergencia intermedia equipada con todo lo que se necesita. Los casos más o menos graves, salen todos derivados a la capital entrerriana y a las manos de Dios, el destino, buda, etc. etc. etc.
Más conflictos
El caso de la joven Rocío Belén Cabrera, quien con 25 años de edad perdiera la vida luego de dar a luz el pasado 14 de junio; prendió todas las alarmas, o eso era lo que parecía esperar la sociedad en su conjunto.
Ese hecho puntual y desgraciado que ahora forma parte de una causa judicial por supuesta mala praxis, continúa su curso ya que la familia de Rocío aseguró que irá hasta las últimas consecuencia para que se conozca la verdad. Fue un caso que disparó varios interrogantes: ¿Qué tipo de acuerdos existen entre lo público y lo privado en la salud de La Paz?¿existe una posible corporación médica que hace muchos años viene cubriendo un desastre tras otro en las atenciones que se realizan en el mencionado nosocomio?¿son probos los responsables de las áreas claves dentro del hospital o continúan llegando por acuerdos políticos partidarios o por ser familiares del poder?¿existe comunicación e información que se socializa con la comunidad o continúa siendo un “fuerte” esa institución pública?
Lo último
Por estas horas y consultada nuestra fuente, pudimos saber que los cofnlictos internos no dejan de permear en toda la estructura organización del hospital 9 de Julio.
Lo último que se sabe es que, la delegada de UPCN dentro del Hospital, lanzó un petitorio con firmas de adherentes contra la Jefa de Personal.
¿Qué es lo que la impulsó a utilizar esta herramienta de queja interna?
Aseguran que son reiteradas las quejas por abuso de autoridad y maltrato laboral propinados por esta funcionaria.
Según cuentan los delegados de UPCN, la Jefa de Personal lleva adelante una práctica que comúnmente se denomina “persecución” dentro del nosocomio. Pero además, estas acciones aparentemente son más graves ya que –aseguran desde adentro- amenaza con despidos y apertura de sumarios administrativos al personal.
También existen otras versiones a las que escuchamos atentamente y aseguran que este petitorio es porque los hace trabajar.
Las firmas no fueron muchas pero fue suficiente el ruido para que tomaran nota dentro del ministerio de Salud Provincial. Llamó mucho la atención que, personal de servicio de limpieza que había solicitado que se confeccione esta nota de adhesiones, después no la firmaron. Nadie sabe todavía el por qué.
Le consultamos a nuestra fuente si se enojaría la Jefa de Personal después de que tomase estado publico esta realidad, nos contestó: seguramente sí, pero que se maneje, es problema de ella.
Para no olvidar
Todos estos conflictos internos continúan como bola de nieve en una institución que debería funcionar al ritmo y armonía de un reloj suizo.
El contexto: Una nueva marcha para pedir por justicia en el Caso Rocío Cabrera se organiza para este jueves 14 de noviembre, organizada por familiares y amigos de la joven que insisten en solicitar a toda la población, que no los dejen solos, que los continúen apoyando.