En el gobierno afirman que la semana próxima se habilitará la página web para que los usuarios que quieren mantener los subsidios a la luz y el gas completen una declaración jurada en la que dejen constancia que califican para el beneficio. Si no lo hacen, comenzarán a pagar la tarifa plena de manera gradual ya a partir de este mes. En Economía afirman que los requisitos exigidos dejarán sin subsidio a solo el 10 por ciento de los hogares, los de mayores ingresos. No obstante, aún no está claro cuál será el porcentaje final porque a partir de ahora el sistema cambió y los subsidios serán a demanda.
Si efectivamente, fuera solo el 10 por ciento de los usuarios los que pasen a pagar la tarifa plena, el ahorro fiscal sería de 15.000 millones de pesos durante este segundo semestre. La cifra equivale apenas a 125 millones de dólares al tipo de cambio oficial cuando los subsidios energéticos el año pasado sumaron 11.000 millones de dólares y este año podrían llegar a 14.000 millones.
En Economía aclararon que la cifra es baja porque la quita aplica solo sobre seis meses y de modo gradual. En un ejercicio contrafáctico, aseguraron que si ese 10 por ciento de usuarios de mayores ingresos no hubiera recibido subsidios durante todo este año el ahorro hubiera oscilado entre los 80.000 y los 100.000 millones de pesos, es decir, entre 660 y 830 millones de dólares. El monto sigue sin ser significativo, pero nadie sabe con precisión cuántos son los que se van a anotar. Por lo tanto, el ahorro podría terminar siendo mayor.
En el gobierno sostienen que el objetivo no es dejar a la gente sin subsidio. Por lo tanto, harán una fuerte campaña de difusión para comunicar los cambios y alentarla a que se registre. En los hechos, hasta ahora no hubo ningún funcionario que saliera a explicar públicamente como va a ser el nuevo esquema, pese a que ya está vigente desde este jueves.
Según el artículo 7 del decreto 322/22, los únicos que no están obligados a registrarse para pedir el subsidio son los beneficiarios de los planes sociales. “Podrán ser incluidos en el padrón de beneficiarios y beneficiarias por la Subsecretaría de Planeamiento Energético en el `Nivel 2 – Menores Ingresos`, sobre la base de la información con la que cuenta el Estado nacional en sus registros”, dice el texto.
El resto de los usuarios sí o sí deberán tramitar el subsidio a través de un registro web que funcionará como una declaración jurada. Los que no se anoten, comenzarán a recibir las facturas con aumento y solo si reclaman se revisará su caso.
No se informó aún de cuánto será el aumento para quienes dejen de percibir el subsidio. Por el momento solo han circulado estimaciones privadas que estiman una suba de 200 por ciento para quienes dejen de estar subsidiados. El gobierno no confirmó ni desmintió ese dato y los cuadros tarifarios aún no están disponibles, aunque fuentes oficiales aseguraron que desde este mes ya rige el nuevo sistema.
Los encargados de llevar adelante la implementación son los entes reguladores, que hasta ahora no han informado nada, y las empresas distribuidoras, que en las últimas horas dejaron trascender que se enteraron del nuevo esquema de segmentación recién cuando se publicó en el Boletín Oficial.
Cammuzi Gas del Sur, por ejemplo, puso un cartel en su página web donde dice: “En el marco de la normativa reciente publicada en el Boletín Oficial relacionada a la segmentación tarifaria, informamos que la compañía aún no cuenta con información respecto a los usuarios alcanzados por la misma. Una vez que se encuentre reglamentada la normativa por la autoridad de aplicación correspondiente, se llevarán a cabo las adecuaciones pertinentes para cumplimentar con las disposiciones vigentes”. De ese modo, buscan evitar que sus clientes saturen el call center con consultas sobre la segmentación, pues si el call center termina quedando fuera de servicio el ente regulador les aplicaría una multa por la deficiente atención a sus clientes.