Se trata de Jorge Bacigalupo, el expolicía que tuvo bajo su custodia los referidos cuadernos antes de que fueran entregados a la justicia.

Un peritaje caligráfico ordenado por el juez Marcelo Martínez de Giorgi determinó hoy que un amigo del exchofer del Ministerio de Planificación Federal Oscar Centeno, que tuvo en su poder cuadernos que derivaron en la apertura de una causa y que contenían información sobre supuestas coimas, escribió sobre ellos.
Se trata de Jorge Bacigalupo, el expolicía que tuvo bajo su custodia los referidos cuadernos antes de que fueran entregados a la justicia y había sido llamado a indagatoria en la causa que investiga la existencia de manipulaciones en el material del denominado «Caso Cuadernos», donde fue enviada a juicio y luego sobreseída la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, además de exfuncionarios de su Gobierno y empresarios, por supuestos pagos de sobornos.
«La letra de las sobreescrituras en el caso denuncias por el empresario Armando Loson, es de Bacigalupo», informaron fuentes judiciales acerca de la pericia realizada por la División Scopometría de la Policía Científica, que comprobó la existencia de «leyendas agregadas y enmendadas» en el Cuaderno 7.
«Centeno no fue el único que escribió en los cuadernos que dieron origen a una causa judicial» dijo Ariel Zak en Minuto Uno, el programa de Gustavo Sylvestre por C5N. «Un peritaje terminó de confirmar que hubo alguien más que metió la mano». Y luego agregó: «entonces volvemos a preguntarnos ¿por qué no quisieron peritar los cuadernos de Centeno? ¿Acaso alguien más que él y Bacigalupo escribieron? ¿Acaso se los dictaron? Recordemos -dijo Zak- que el primer peritaje sobre los cuadernos determinó que tenían distintas velocidades de escritura: al principio solo anotaba viajes y sobre el final tambien anotaba supuestos trayectos con efectivos y bolsos de dinero«.
Qué dicen los peritajes
De acuerdo al informe perital, de 23 fojas, se comparó la caligrafía presente en los cuadernos de la investigación con un archivo de la Caja de Retiros, Jubilaciones y Pensiones de la Policía Federal Argentina, donde se encontraba el legajo de identidad de Bacigalupo y un expediente, que consta con escritura manuscrita del peritado.
También se trabajó a partir de constancias manuscritas secuestradas en un inmueble de la calle Moldes, en la ciudad de Buenos Aires, obtenido en el allanamiento de la vivienda, domicilio de Bacigalupo, que comprendía «agendas, anotadores y papelería varia» y se obtuvo a «los fines de establecer el carácter o no de indubitado de los mismos».
A eso se sumó un «cuerpo de escritura obtenido en sede tribunalicia» durante el transcurso de este año, donde se verifica que «las características morfológicas se mantienen al igual que las combinaciones de signos del modelo cursivo con el de imprenta».
En estas muestras se encontró la «enmienda en algunos signos literales tales como la “y”, “r”, “n”, tachaduras, varianzas de inclinación, presionado», que indicaría «falta de espontaneidad» que «puede ser atribuido a un estado de nerviosismo del acto propio», de acuerdo al documento firmado por el Comisario Alejandro Matías Centofanti, Jefe de la División Scopometría, la Inspectora Analía Noemí Ojeda y los peritos de parte Guillermo Latour, Gastón Latour y Jorge Baz.
Por otra parte, el informe destacó que el trabajo a través de muestras fotográficas, «pese a tratarse de muestras obtenidas de los cuadernos originales, imposibilitan a los peritos adentramos en el estudio» de los escritos, que «solo pueden ser analizados en el sustrato original».
«En consecuencia, si se contara efectivamente con el material original para la examinación, sería posible recabar una mayor cantidad de elementos valorativos que permita elevar el grado de asertividad en el colofón presentado», amplía.
La indagatoria a Bacigalupo
En mayo de este año, Marcelo Martinez de Giorgi citó a indagatoria para realizar un cuerpo de escritura a Jorge Bacigalupo, en el marco de la investigación que analiza las irregularidades, enmiendas y tachaduras en los cuadernos del chofer Centeno, que cobró impulso luego de que fuera ratificado el juez Martínez de Giorgi a cargo del expediente.
Bacigalupo fue allanado el 10 de marzo pasado y en su domicilio se secuestró documentación para cotejar su escritura con varias anomalías detectadas en los cuadernos.
Si bien la Justicia ya tiene material para cotejar, la defensa del propio Bacigalupo pidió realizar un cuerpo de escritura, lo que ahora fue ordenado por el juez.
Fuente: (C5N)