Opina Argentina encuestó a más de 1.700 personas a nivel nacional. Una alianza de derechas se impondría a un PJ con Cristina y Kicillof. El rol trascendental de PRO y el dilema de la fusión.
En medio de reconfiguraciones y desafíos que requieren ejercer con arte el pragmatismo, los distintos espacios políticos están envueltos en su propios dramas y pases de facturas (la interna CFK-Axel Kicillof y el fantasma del Gobierno de los Fernández, la UCR ya formalmente partida, Schiaretti y el peronismo anti k mirando de reojo todas las encuestas).
En ese marco, hay un aspecto (un dilema que persiste) que parece ordenar todas las especulaciones electorales: la absorción -o no- de PRO por parte de La Libertad Avanza.
Puros o aliados, quizá sea la cuestión. La estrategia que finalmente decida encarar LLA será determinante en la intención de voto 2025. Eso es lo que deja en claro la última encuesta de Opina Argentina (más de 1.700 casos a nivel nacional) a cargo del consultor Facundo Nejamkis. Veamos.
En un primer dato relevante, siguiendo el sondeo de Opina Argentina, los resultados serían determinantemente diferentes si el partido de Javier Milei decide o no aliarse electoralmente con la fuerza del expresidente Mauricio Macri.
La alianza de derechas ya funciona y es de hecho, tanto en la dinámica legislativa como en los nombres que desembarcan a cada nueva renuncia de gabinete. La performance electoral de PRO y LLA será mediocre si en las legislativas de 2025 las fuerzas optan por ir en boletas diferenciadas.
En el caso de que LLA decida la confección de una boleta «pura» en términos de nombres propios libertarios, su competitividad electoral corre riesgo de verse opacada por un triunfo del PJ que eventualmente integre los dos polos en disputa (CFK y Kicillof, que se saludaron con un frío beso el pasado miércoles).
En este escenario, donde PRO competiría con boleta propia, se da un empate técnico entre el PJ unido (excluyendo a Schiaretti, por supuesto) y LLA, con 33 puntos porcentuales para cada espacio.
En el mismo mapa potencial, el PJ de Schiaretti unido a radicales «sin peluca» (13%) desbancaría a PRO (11%) del podio, lo que representaría toda una novedad política.
Los números se modifican de manera definitiva si PRO y LLA deciden finalmente formalizar un nuevo híbrido electoral de derechas: para octubre la potencial alianza contaría con una intención de voto de casi el 40%, siete puntos arriba de un PJ unido y organizado.
El peronismo discute internamente
El peronismo aún se encuentra en la discusión por las internas partidarias con fecha 17 de noviembre. Hay dos apuntados: la expresidenta Cristina Fernández, y el gobernador de La Rioja Ricardo Quintela.
«Primero la Patria», el rótulo que decidió Cristina para su boleta, ya tiene nombres y autoridades.
A priori se perfila una elección interna que podría generarle algún costo al PJ en las legislativas de 2025. Todo es provisorio y está atado a las combinaciones que hagan propios y extraños.
“Alguien que no puede decidir entre Quintela y Cristina obliga a reevaluar las cosas”, dijo Máximo Kirchner, quien funciona como vocero de su madre, en un claro dardo para el gobernador bonaerense.
Según el mismo relevamiento de Opina Argentina, la disputa por la legitimidad en el PJ no es para nada una discusión sellada.
Cuando se preguntó a quienes se identifican con el peronismo, con cuál figura política se sienten más interpelados, Kicillof (47%) se impuso sobre CFK (39%) por 8 puntos porcentuales. La pelea por la representación recién comienza. (Cba24)