El nombre del exintendente José Carlos Aimone se afirma como precandidato por la oposición en la ciudad de La Paz, lugar en donde gobierna la alianza UCR-PRO desde el 2015. Pero en el justicialismo también se instalan nombres de mujeres que seguramente serán protagonistas en sus filas.
Con los números de los últimos sondeos en la mano y con una intención de votos que vuelve a darle al Pj paceño una chance electoralmente competitiva, la figura del contador José Carlos Aimone, parece no tener discusión. Pero si hay algo que siempre le costó al peronismo fue la conformación de los casilleros que representan a sus “compañeras”. Algo que en este 2023, aparentemente, comienza a cambiar y hacerse menos complicado.
Mientras comienzan a verse los primeros movimientos militantes en el territorio, con la colocación de algunos pasacalles del candidato, reuniones en algunos barrios de la que poco de habla y nada oficial aun; aparece otro nombre con fuerza de proyección electoral: María Laura Saad, actual Secretaria de Turismo de la Provincia, militante surgida de la JP, amiga personal de Aimone, ex Concejal y ex Directora de Turismo en La Paz y ex Directora de Turismo en Concepción del Uruguay.
Garantizar el trasvasamiento con fuerza de mujer
A la figura de Saad, acompañan otras dirigentes políticas y sociales a las que también midieron y buscarán proyectar una tarea en lo institucional, que ya vienen realizando hace un tiempo en el territorio.
La Profesora de Historia, Marisa Villalba, actual Presidenta de la Asociación Civil “Las Bases” es una de ellas. Desde su espacio ha encabezado la organización de distintos eventos de interés general con participación ciudadana, entre ellos: conversatorios relativos a Salud Pública y Recursos de nuestro Río Paraná e Hidrovía.
Villalba logró afianzar una relación al sector juvenil, clave a la hora de ampliar equipos de trabajo y militancia activa de la propuesta que impulse el candidato. Viene demostrando su interés en el abordaje integral para esa franja etaria. Impulsó la Obra de Teatro “El Difuntito”, enmarcada en el programa “Teatro x la Identidad”, que en el caso de La Paz, se presentó en el Cine Urquiza sala llena, con estudiantes de escuelas secundarias. En ese mismo sentido, ha llevado el cine a los barrios en los que logró generar un constante acercamiento a los más chicos y sus familias, tarea que desarrolla junto a la “Agrupación Las Bases”.
Lo de Marisa Villalba ha calado en la dirigencia, no solo paceña, también en la provincia, por lo interesante de su mirada política y sobre todo, por la gran carga de sensibilidad social. Esto ha generado que le ofrecieran ocupar distintos cargos provinciales en su localidad y en esta nueva etapa de construcción proselitista, aseguran, viene redoblando la tarea militante convencida en la oportunidad que se le presenta al peronismo local, de recuperar la conducción del municipio.
Nancy Paola Ruiz Díaz, dirigente social, responsable del Movimiento Evita en La Paz y activa militante del peronismo en la provincia. Hermana del actual conejal del Frente Creer Entre Ríos, Gustavo Ruíz Díaz. Proviene de una familia ligada a la militancia peronista paceña desde siempre.
Fue incorporada a sondeos de opinión y pudo demostrar que su tarea en lo territorial tiene visibilidad. “Creo, más que en los datos fríos de las encuestas, en el compromiso real de la gente para cambiar esta realidad en la ciudad y eso es lo que va a suceder”, afirma.
Cuando uno habla con ella, se encuentra con una mirada muy interesante en cuanto a la política con perspectiva de género. La modalidad de asamblea es su fortaleza en el territorio. Viene logrando la incorporación de jóvenes que militan por primera vez en política y es éste, tal vez, su tesoro más preciado y su responsabilidad mayor, cuidar que esos jóvenes, no terminen defraudándose.
Con un fuerte perfil popular, Paola Ruiz Díaz ayuda a sostener el funcionamiento de merenderos y comedores comunitarios. Incorporó al circuito de la economía Popular a mujeres que hoy defienden esa herramienta. Impulsa talleres educativos y levanta las banderas identitarias de su espacio político, algo que según la propia dirigente afirma, no dejará de hacer nunca, esté donde le toque estar. En ese sentido, la consigna: “tierra, techo y trabajo”, conforman la columna vertebral de sus proyectos políticos. Con la misma fuerza, impulsa las luchas colectivas feministas y de respeto a las diversidades. Viene trabajando, junto a su grupo, en la creación de conciencia en la niñez, sobre los conceptos de Memoria, Verdad y Justicia. Algo que se vio reflejado hace muy poco con gurises del Centro Comunitario “Luz de Esperanza”.
Tanto Ruiz Díaz como Villalba mantienen una muy buena relación con María Laura Saad. Se las reconoce como parte de una generación contemporánea de mujeres que comparten luchas y procesos históricos. Puede existir en esas líneas de pensamiento y actividad doctrinaria fuertemente ligada al justicialismo, el entarimado político que el precandidato José Carlos Aimone necesita.
En todo caso, habrá que preguntarse si será la etapa de Aimone o el de María Laura Saad, la que podrá reflejar el tan necesario trasvasamiento generacional con fuerza de mujer que la política paceña busca desde hace mucho tiempo.