Mientras continúa el conflicto en Israel, la agencia de la ONU para los refugiados palestinos (UNRWA) alertó este domingo que, tras el saqueo de almacenes y centros de distribución de ayuda alimentaria bajo su gestión, «el orden público en la Franja de Gaza se está desmoronando».

«Miles de personas entraron en varios almacenes y centros de distribución de la UNRWA en el centro y en el sur de la Franja de Gaza», indicó la agencia de la ONU en un comunicado.
«Es una señal preocupante de que el orden público empieza a desmoronarse tras tres semanas de guerra y un estricto asedio sobre Gaza», señaló el jefe de la UNRWA en Gaza, Thomas White.
En uno de los depósitos de la agencia en la localidad de Deir al Balah, en el centro de la Franja, se almacenan los suministros humanitarios que han ido llegando al enclave palestino desde que los primeros convoyes llegaron a Gaza a través del punto fronterizo de Rafah, con Egipto, el 21 de octubre.
Desde que Israel impuso un bloqueo total al suministro de alimentos, agua, medicinas y combustible a Gaza, llegaron 84 camiones con ayuda. Sin embargo, las organizaciones de ayuda humanitaria advierten que el suministro es muy insuficiente.
Antes del conflicto, una media de 500 camiones diarios entraban en Gaza, según datos de la ONU. «Los suministros se están agotando y la ayuda que llega a la Franja de Gaza en camiones desde Egipto es insuficiente», insistió White, y subrayó que la población gazatí tiene unas «necesidades inmensas».
El primer ministro israelí advirtió que la guerra en Gaza será «larga y difícil»
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, advirtió que la guerra contra el movimiento islamista palestino Hamás en la Franja de Gaza será «larga y difícil» al tiempo que confirmó el aumento de la ofensiva terrestre en el enclave palestino.
«La guerra en la Franja de Gaza será larga y difícil y estamos listos«, declaró este sábado Netanyahu en una conferencia de prensa en Tel Aviv, en la que añadió que el Ejército «destruirá al enemigo en tierra y bajo tierra«, en referencia a la red de túneles por los cuales Hamás burla el bloqueo del enclave.
Además, aseguró: «En las primeras semanas de la guerra lanzamos ataques aéreos masivos que asestaron un duro golpe al enemigo. Eliminamos a muchos terroristas. Sin embargo, sólo estamos en el principio. Esta es nuestra segunda guerra de independencia».
Después de que los militares endurecieran este viernes por la noche los ataques terrestre y aéreo contra la Franja de Gaza, el funcionario aseguró que la ampliación de la ofensiva terrestre fue aprobada «por unanimidad». «Nuestro objetivo es singular: derrotar al enemigo asesino», afirmó.
Por otra parte, se refirió a las acusaciones contra el Ejército israelí de que están cometiendo crímenes de guerra. «Los que acusan a las FDI (Fuerzas de Defensa de Israel) de crímenes de guerra son unos hipócritas», consideró, en tanto acusó a Hamás de crímenes de guerra por usar a civiles como escudos humanos y por quedarse con combustible que era para uso hospitalario.
«Pido a los civiles de Gaza que evacúen hacia el sur de la Franja. El enemigo utiliza cínicamente los hospitales como refugios. Israel libra una batalla por la humanidad contra bárbaros», manifestó.
La ONU advirtió esta semana que los bombardeos contra zonas densamente pobladas y el bloqueo de la Franja de Gaza constituyen crímenes de guerra, y cuestionó que el Ejército israelí haya pedido a la población gazatí que abandone ciertas zonas mientras mantiene un férreo bloqueo que impide la entrada de suministros en el enclave palestino y la huida de la población.
«Israel no sólo está librando nuestra propia guerra, sino una guerra por toda la humanidad«, apuntó Netanyahu y añadió: «Nuestros aliados en el mundo occidental, y nuestros socios en el mundo árabe, saben que, si no ganamos, ellos serán los siguientes en la campaña de asesinatos del eje del mal».
Israel endureció su operación terrestre en Gaza con el envío de tanques e infantería respaldados por ataques desde el aire y el mar que «hicieron temblar el suelo» del enclave palestino, según el ministro de Defensa, Yoav Gallant, quien aseguró que la guerra entró en una nueva etapa.