El dirigente del PRO se mueve como precandidato a gobernador, sabiendo que está ante una oportunidad histórica: destronar al justicialismo luego de 20 años. Todas los precandidatos que están disputando un lugar.

La Unión Cívica Radical (UCR) de Entre Ríos se encamina a una nueva elección interna, que tendrá lugar el 16 de abril. Se trata comicios donde sólo podrán votar los afiliados, que en territorio provincial rondan los 73 mil. Será una contienda clave, en la antesala del cierre de listas de quienes competirán en la provincia dentro de Juntos por Entre Ríos, denominación local de Juntos por el Cambio (JxC). Pero además será también fundamental el resultado de las urnas en las ciudades, porque podría depurar el menú -amplio, a priori- de precandidatos que se presentan como opción a las intendencias dentro de la alianza.

Hay un elemento tácito, no nombrado, que también es parte de la disputa en el centenario partido. Se trata de Rogelio Frigerio. El dirigente del PRO se mueve como precandidato a gobernador, sabiendo que está ante una oportunidad histórica: destronar al justicialismo luego de 20 años. Pero además una posible asunción del exministro del Interior traería aparejado en el territorio entrerriano lo que en 2015 tuvo a Mauricio Macri como protagonista, aunque a nivel nacional: por primera vez no gobernaría un radical o un justicialista. Ese condimento pone nuevamente en crisis la identidad militante en la UCR, aunque sólo en algunos casos. Hay quienes creen que Frigerio es la mejor opción y el debate pasa por otro lado; mientras que otros consideran que reforzar la estirpe radical pasa por poner un candidato propio, que definitivamente ponga al espacio en el lugar que merece dentro de la coalición hoy opositora.

En ese contexto, serán dos las listas que competirán por conducir el Comité Provincial. Una, Radicales para Conducir y Gobernar, estará encabezada por Amado Fuad Sosa, dirigente de la Corriente Illia -mayoritaria en el partido- y quien ya ocupara la Presidencia del partido entre 2014 y 2016. De amplia militancia gremial en la Asociación del Personal Legislativo de Entre Ríos (APLER) fue también diputado provincial y es considerado un referente que aglutina, que une. Por tal motivo su nombre fue ratificado el sábado 18 de marzo, en una reunión que autoridades partidarias mantuvieron en Villaguay.

«Yo ciertamente no tenía la intención de repetir en el cargo, pero hubo un pedido de los compañeros y he decidido afrontar el desafío», señaló Sosa en contacto con El Destape. Y agregó: «La mayoría de las corrientes internas del partido están en este espacio. No sólo la Illia, sino que también Evolución, el espacio a nivel nacional de Martín Lousteau». En efecto, dentro de la nómina confluyen esas dos vertientes y otras más, como Alternativa Radical, cuya figura predominante es la del exconvencional constituyente y exlegislador nacional Fabián Rogel; Compromiso Radical, del exdiputado nacional Jorge Lacoste; y Renovación y Cambio, liderada por la diputada provincial y exintendenta de Victoria Gracia Jaroslavsky. Radical desde la cuna y de sangre -es hija de Nahum César «Chacho» Jaroslavsky, presidente de la bancada radical en Diputados de la Nación desde 1987 a 1991 y hombre de máxima confianza del expresidente Raúl Alfonsín-, ésta última suena como posible compañera de fórmula de Frigerio.

Y es que el común denominador entre todas las líneas que se aglutinan en Radicales para Conducir y Gobernar es la coincidencia en que el dirigente del PRO debe ser el candidato a gobernador, sin discusiones. No genera ruido al interior, en absoluto. Incluso teniendo entre sus filas a Rogel, que hoy se postula para el cargo, aunque muchos creen que finalmente no irá a las urnas. «Nosotros creemos que el candidato debe ser el nombre más competitivo. Y que ese nombre puede no ser radical, pero eso no significa que el rol del partido no deba ser protagónico. En 2015, cuando Alfredo De Ángeli fue candidato, si bien no obtuvimos la provincia, ganamos 29 intendencias, de las cuales 27 fueron radicales, una del PRO y una de un vecinalista. Es decir, un nombre no es el todo, lo que vale es la estructura, las ciudades gobernadas, las bancas en la Legislatura y otros cargos que hacen al gobierno. La cabeza es una sola, pero una gestión es más amplia que eso», explicó Fuad Sosa.

No obstante, el exlegislador admite que el radicalismo no ha tenido en Juntos por el Cambio el rol que muchos creyeron en un principio, al menos a nivel nacional: «Es posible que haya habido gestos de ingratitud. Pero en las provincias el escenario es diferente. Y acá creemos que tenemos el lugar que buscamos desde un principio y que merecemos.

La lista de Fuad Sosa es apoyada por figuras importantes del centenario partido, como el exdiputado provincial Atilio Benedetti, uno de los máximos responsables de la concreción de la alianza PRO-UCR en 2015; la actual senadora nacional Stela Olalla; el intendente de La Paz y referente de Evolución en la provincia, Bruno Sarubi; el expresidente del partido, Jorge D’agostino, las diputadas nacionales Gabriela Lena y Marcela Ántola y los diputados provinciales Eduardo Solari y Uriel Brupbacher. Hay también intendentes que supieron estar en la vereda de enfrente de la conducción, pero han pegado el salto en los últimos meses, como Carlos Weiss (Viale), Manuel Tennen  (Villa Urquiza) y Héctor Solari (María Grande).

«La UCR perdió la vocación de poder»

Hay otro sector del radicalismo que cree, en cambio, que el partido está inmóvil y que no busca el protagonismo que debe tener en Juntos por Entre Ríos. Es el que lidera a nivel provincial el diputado nacional Pedro Galimberti, que también trabaja para ser una opción para la Gobernación. Él motoriza la lista Cambio Radical, encabezada por su principal socio político, el intendente de Crespo, Darío Schneider.

«Básicamente lo que queremos es recuperar el partido y ponerlo de pie. Precisamos un radicalismo movilizado, más activo. Y para eso hace falta trabajar de forma articulada en toda la provincia. Queremos llevar adelante una gestión sumando el trabajo que realizan los municipios. Hoy el Comité Provincial está de espaldas a lo que hacen los dirigentes locales, falta vincular lo que se realiza en las ciudades. Todo eso tendrá como consecuencia un gran aporte a un futuro gobierno provincial, donde también tenemos la expectativa de competir y generar cambios en Entre Ríos», indicó Schneider.

Para el intendente de Crespo, la interna es una buena oportunidad de movilizar a la militancia: «Pone al partido en actividad, abre los comités locales, se reanudan el trabajo de los afiliados. Es positivo por ese lado». Consultado sobre si hubo conversaciones para una lista de consenso, el dirigente fue tajante: «Nunca hubo conversaciones para llegar a la unidad. Nosotros propusimos conducir el partido con mi nombre y nadie ha hablado con nosotros para llegar a un acuerdo. Con el otro sector no estamos ni bien ni mal, cada uno hace su trabajo. Yo no estoy peleado con nadie».

Schneider consideró que en Entre Ríos hace falta un «radicalismo más comprometido». Y explicó: «Los últimos años hemos visto a un Comité que buscó cómo generar acuerdos, sin importar el lugar, cuando la UCR debe tener un rol preponderante. Para eso se deben apoyar candidatos radicales, que sean competitivos, que den los debates. Acá se debate eso, el lugar del radicalismo de cara a lo que viene. Si vamos a tener un radicalismo sumiso, con un candidato puesto; o si vamos a dar la pelea con nuestros candidatos y posicionando al partido de una forma distinta de cara a los acuerdos electorales».

Para finalizar, el candidato de Cambio Radical dio a entender que el centenario partido ha perdido la voluntad de gobernar: «Hoy la UCR no da los debates electorales que debe dar. Busca cómo acordar primero, desmovilizando a la militancia. Se descansa en la comodidad de los acuerdos y no en mover la estructura en función de desafíos electorales. Para eso están los partidos, para tener vocación de poder. Y la UCR perdió la vocación de poder». 

Qué se juega en las ciudades

No sólo habrá interna a nivel provincial. También la habrá en algunas ciudades. En Paraná habrá dos listas, una por espacio. Ambas están encabezadas por exfuncionarios de Sergio Montiel –gobernador entre 1999 y 2003-, de la mano de Sergio Avero (Radicales para Gobernar) y Luis Beber (Cambio Radical). Se estima que la disputa podría “limpiar” el mapa de precandidatos a la intendencia. En el primer espacio están anotados Roberto Sabbioni (Frente Radical Independiente); Hugo Gemelli (Corriente Illia); Silvina García (Movimiento de Afirmación Radical) y Leandro Brasesco (Evolución); mientras que en la segunda está Jorge Izaguirre (Paraná Cambia); Juan Carlos Ortega, Gustavo Curvale y Lucía Varisco (Movimiento de Unidad Radical).

En Concordia habrá tres opciones, encabezadas por Lorena Aguilar (Evolución); Juan Ramón Sanso La Madrid (Radicales para Gobernar) y Elsa Sanabria (Cambio Radical). En Concepción del Uruguay, en tanto, habrá dos nóminas, lideradas por Juan Parrila (Radicales para Gobernar) y Oscar Treppo (Cambio Radical).

Fuente: (El Destape) – Por Juan Pablo Scattini

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *